Los métodos de gestión de cultivos sin arado requieren adaptar las herramientas de laboreo y siembra para trabajar en los residuos vegetales. Dientes o discos, ¿qué elegir?
El mínimo laboreo es un término genérico que engloba muchos métodos agrícolas diferentes. El factor común es que no se utiliza el arado. Para preparar la parcela para la siembra, se realiza un laboreo poco profundo de entre 5 y 10 cm. La intensidad del laboreo puede variar, cubrir toda la parcela o solo a lo largo de la línea de siembra (laboreo en franjas). Incluso puede eliminarse por completo en el caso de las técnicas de siembra directa.
Preparar la parcela: Utiliza rodillos para el mínimo laboreo
El primer paso en la gestión de los cultivos es preparar el lecho de siembra. Para los cultivos de primavera, hay que destruir la cubierta vegetal. Para destruir las especies resistentes a las heladas, puede bastar con pasar el rodillo después de una helada. Para destruir otras especies o después de un tiempo templado, un rodillo de corte frontal desvitaliza la cubierta vegetal. También es posible utilizar un rodillo de corte que potencia la descomposición al aumentar la laceración de las plantas, especialmente durante los inviernos suaves o cuando la cubierta del suelo está poco desarrollada.
Cultivadores para mínimo laboreo
Para un laboreo poco profundo, puede utilizarse un cultivador con dientes que trabaje a entre 5 y 15 cm. Un cultivador es capaz de gestionar grandes cantidades de residuos, crear tierra fina en la superficie y reducir los terrones, para la presiembra y posterior siembra. Para un trabajo más profundo, se puede utilizar un cultivador con dientes y discos para labrar la tierra hasta 35 cm.
Para gestionar los residuos de los cultivos y las cubiertas vegetales, lo ideal es utilizar un rastrojador con dientes o discos. Los rastrojadores de dientes trabajan el suelo a mayor profundidad en los campos que requieren pseudolaboreo. El cultivo profundo es ideal para arrancar malas hierbas con raíces pivotantes. Sin embargo, el cultivo profundo requiere más potencia. Además, los dientes pueden atascarse con grandes cantidades de residuos.
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Cultivo de rastrojos: se realizará durante todo el año
Los rastrojadores con discos trabajan más rápido y a menor profundidad, entre 3 y 10 cm. Son perfectos para el desherbado mecánico. Mezclan la tierra y los restos vegetales, y matan las malas hierbas con eficacia. Hay que tener cuidado con los fenómenos de compactación en condiciones húmedas. Los rastrojadores de discos no se recomiendan en parcelas pedregosas ni cuando hay muchas plantas perennes (riesgo de replantación).
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El cultivo de rastrojos se realizará durante todo el año
Siembra
Para sembrar tus cultivos, las sembradoras de dientes tienen fama de ser polivalentes en todas las condiciones de suelo y clima, además de garantizar una buena nascencia de las plántulas. Están adaptadas a la siembra en presencia de un acolchado y pueden trabajar en condiciones húmedas sin problemas de compactación. Mezclar el suelo aumenta la mineralización, pero también la aparición de malas hierbas. Los dientes pueden atascarse cuando hay muchos residuos.
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Las sembradoras con discos alteran menos el suelo, lo que reduce la aparición de malas hierbas. Los discos facilitan las operaciones cuando hay muchos residuos, por ejemplo con los métodos de siembra directa. La profundidad de siembra es más fácil de controlar. Estas sembradoras suelen requerir menos potencia de tracción. Hay que tener cuidado con los fenómenos de compactación en condiciones húmedas.
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